La segunda lección es hacer el ejercicio de visualizar. Es una tarea o juego mental ineludible. Es un proceso de dos fases: 1. Pensar, imaginarse como se quiere uno ver en el largo plazo (sea objetivo en establecer sus metas). 2. Imagínese a usted teniendo éxito (haga un recorrido del proceso).
Es un ejercicio permanente. Revisar opciones, alternativas una y otra vez basado en los cambios de los aconteceres del día a día. El mundo es totalmente dinámico, igual en los negocios y ni hablar de los mercados. Siempre llegan nuevos elementos que hacen reconsiderar lo pensado (temas que generan sonrisas y otras que generan alertas!!). Pero de eso se trata, de hacer este ejercicio de visualización una y otra vez aunque muchas veces el resultado sea difuso. No importa, no hay que asustarse con eso. Este es un tema de preparación mental para todo emprendimiento.
He sido un convencido de tener la actitud mental positiva para trabajar un emprendimiento. Es la forma de sumar, de conectar (enrocarse), de crecer, de abrir nuevas puertas de oportunidades, de hacer agradable el proceso del emprendimiento, de motivar a los socios y los colaboradores. Es una forma de ser.
Tener presente que hasta los emprendimientos estructuralmente bien pensados pueden fracasar. Eso de tener un plan de negocios con todas las de la ley no es garantía de nada. Cada vez que tengo la oportunidad de hablar con emprendedores exitosos que llevan años en el mercado confirmo que al final de cada día ajustan su plan estratégico, en otras palabras hacen un ejercicio de improvisación estratégica. Este será tema de otra lección de negocios.
1 comentario:
Hay que tener claro lo que se quiere, es decir la meta... el como puede variar en el día a día.
Esto no quiere decir que la meta no pueda variar, claro, como dide Carlos al emprender se puede fracasar pero eso no es lo importante, lo importante es el olfato pra no llegar a un punto en el cual ya no se pueda levantar nuevamente, al contrario hay que estar alerta.
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